Me cago en la Madre que parió a Murphy

¿Habeís escuchado hablar de un tal Murphy?
Fué un tipo que un día (o varios) aburrido, se dedico a sacar lo que para el sería el pase a la posteridad, pero que a los demás, maldita la gracia que nos hace.
Como digo, un buen día, aburrido, sacó unas leyes (y el jodío tenia razón) de cási todo lo que acontece al más comun de los mortales, osea nosotros.
Bueno, pues, como no podía ser menos, también llegó la Legislatura Lógica Murphiana a las bicicletas. Echadle un vistazo.
Yo, hoy, solo me voy a fijar en la nº 25. ¡¡El aire!! ¿Como puede ser que, a la ida, el aire te de de frente. Y a la vuelta también? El cab*** de Murphy tiene la culpa, seguro.
En fin.
Hacía tiempo que acariciaba la idea de darme una vuelta en solitario. Pero no una vuelta normalita, no. Una vuelta grande, y a ser posible, dura.
Así que, cuando el sábado por la noche nadie del grupo dío señales de vida, me dije:
.-Ea, pues me voy solo.
Y a las 8:30 de la mañana enfilé el camino que había previsto para este domingo.
He de reconocer que al principio, hasta Guillena, iba un poquito dudoso. Sobre todo por el aire del maldito Muphy que me entraba de frente, pero una vez orientado el cámino de la Cruz de la Mujer, la cosa cambió.
Llevaba 26km, y aunque sabía que ahí empezaba lo peor y que restaban 30 para estar en el mismo lugar, pero mirando "pa" casa...
¡No sé! Me estaba animando. Ya me veía en La Cantina.
Ni que decir tiene que la mañana ha sido magnifica, fría en algún momento, pero la zona lo merecía. Además, al contrario de lo normal, hoy la Ruta del Agua de Guillena, estaba bastante solitaria. (me crucé con 8-9 bikers, no más).
Fabuloso ver el Embalse del Gergal lleno "hasta la bola", parece mentira que el verano pasado estuviese seco.
Hoy he podido darme cuenta lo que cambiamos cuando nos metemos en el coche. Me he cruzado con muchos en el trayecto desde Guillena a "La Culebra". He de aclarar que es un camino de muy buen firme y con bastante tráfico, sobre todo los fines de semana. Pues bien, si me he cruzado con unos veinte, tan solo la cuarta parte han aminorado la marcha para no levantar mucho polvo o poder darme con alguna piedra de las que salen despedidas de las ruedas. Y, ojo, algunos incluso llevaban incluso portabicis, por lo que es de intuir que saben lo que es "tragarse" una nube de polvo de un "pavo" que se cree Carlos Sainz.
Total, quitando ese detalle me he "chupao" una ruta fenomenal. 82km piqué al llegar a casa.
Aquí os la dejo.
Y algunas fotos.